La Federación de Empresas de La Rioja informa de que: «Las empresas y los autónomos están a travesando una situación dramática que se puede ver agravada en los próximos meses si el Gobierno de España no recapacita y toma la decisión de extender los ERTEs a todas las empresas que lo necesiten, sean del sector que sean.

Es sorprendente que el Gobierno argumente que hay sectores que tienen más capacidad de recuperación o están en una situación más favorable, cuando la realidad es que muchas de empresas en esos mismos sectores atraviesan una situación económica caótica y en máximo riesgo de desaparición.

El argumento de la no extensión de los ERTEs por su elevado coste es también incomprensible. Que los ERTEs alcancen a todas las empresas y autónomos que lo precisen tiene un coste muy inferior a lo que supondría que estas compañías entraran definitivamente en ERES, concursos de acreedores, quiebras, etc.

Está claro que mantener el empleo en un ERTE es más factible y más barato que una alternativa indeseable que nos llevaría a la desaparición de las empresas y a la destrucción de miles de puestos de trabajo que engrosarían las filas del desempleo. Si no salvamos las empresas, los más negros vaticinios anuncian más de 6 millones de  parados en un corto periodo de tiempo.

Además, desgraciadamente nos vamos a ver abocados a llegar a una situación parecida a la de 2008, con la anterior crisis financiera, que provocó la pérdida de empleo de miles de españoles.

La Federación de Empresas de La Rioja (FER) quiere dejar claro e insistir una vez más en que una empresa o un autónomo que pierde su actividad es muy difícil que pueda retomarla nuevamente. Lamentablemente, las empresas que desaparecen no se recuperan. La conclusión es que un ERTE es la medida más eficaz, más rápida y de menor coste para salvar a nuestro tejido empresarial.

La postura del Gobierno choca frontalmente con la de los  representantes empresariales y los sindicales, que coinciden en la importancia de extender los expedientes temporales de regulación de empleo en cualquier empresa en que sea preciso, independientemente del sector.

Argumentar que hay sectores que están mejor y otros peor es no entender que todos los sectores económicos están relacionados  y que unos repercuten en el funcionamiento y la actividad de los otros.

Por ello, es importante que el Gobierno recapacite, tenga sentido común y tome una decisión que será beneficiosa para empresas y trabajadores, para el conjunto de los españoles y para el futuro de este país, que está sufriendo en Europa las peores consecuencias de la pandemia. Países de la Unión Europea socios de España como Alemania, Francia e Italia ya han realizado hace tiempo esa reflexión y han tomado medidas tendentes a salvaguardar su tejido empresarial y su empleo.

Por último, nos llama poderosamente la atención a los empresarios que estando tres millones y medio de trabajadores en ERTEs, como han estado en los últimos meses, ni uno solo de ellos pertenezca a una empresa pública. Ninguna empresa pública ha sufrido un ERTE», concluyen.