La medida, que contempla créditos con un plazo de cinco años y dos de carencia en condiciones muy ventajosas, apoya a bodegas y viticultores y garantiza una producción de vino acorde a la calidad y el prestigio de la DOCa Rioja.

La presidenta del Gobierno de La Rioja, Concha Andreu, ha presentado una nueva línea de financiación para la compra de uva, articulada por el Gobierno de La Rioja a través de la Agencia de Desarrollo Económico de La Rioja (ADER) y en colaboración con Iberaval. Dotada con 112 millones de euros, la línea ya está operativa y apoya la adquisición de uva por parte de las bodegas de La Rioja a los viticultores de la comunidad autónoma, mediante créditos a largo plazo y en condiciones muy ventajosas. En la presentación han participado también el gerente de la ADER, Fernando San José, y el director general de Iberaval, Pedro Pisonero.

Andreu ha destacado que la medida muestra el compromiso “firme e indiscutible” del Gobierno con “un sector estratégico en La Rioja y que trasciende lo económico, da prestigio e imagen, crea empleo y es motor económico”. “Apoyamos a nuestras bodegas para que puedan adquirir uva, ayudamos a nuestros viticultores para facilitar la venta de la mayor cantidad posible de uva y garantizamos la calidad del vino que después ampara la DOCa Rioja, con el prestigio que nos precede”, ha apuntado la presidenta. “Este Gobierno defenderá siempre los intereses del sector con todas las herramientas de las que dispone”. La presidenta ha destacado también el momento oportuno en el que surge la medida, cuando el sector ya ha decidido las normas de campaña y el rendimiento a través de la interprofesional y el Consejo Regulador.

La dotación de la nueva línea de financiación cubre las necesidades máximas de financiación de las bodegas para compra de uva en este ejercicio, según las estimaciones realizadas, y les apoya en un año complicado por el impacto económico del COVID-19, que ha frenado sus ventas y, en consecuencia, ha generado tensiones de liquidez. Como ha explicado el gerente de la ADER, Fernando San José, la cuantía máxima por petición de financiación puede llegar hasta los 1,6 millones de euros para pymes y hasta medio millón de euros para no pymes, con un máximo del 50 por ciento de las ventas de ejercicios anteriores. “El plazo de financiación, de hasta cinco años con dos años de carencia, es lo suficientemente amplio para que puedan acometer esta inversión con tranquilidad y sin distorsionar el día a día del negocio y el tipo de interés se sitúa en el Euribor +1 por ciento, que además está avalado al cien por cien, lo que universaliza esta medida”, ha apuntado San José. “Además, ADER subvenciona el cien por cien de los costes que puede tener el aval”.

Por su parte, el director general de Iberaval ha valorado que el Gobierno de La Rioja haya confiado en la sociedad de garantía recíproca para poner en marcha esta línea de financiación que ha considerado “oportuna y efectiva”. “Nosotros devolvemos la confianza en forma de avales y préstamos para las pymes y nuestro objetivo inicial es siempre ser útiles a las pymes”, ha apuntado. Pisonero ha explicado que la gestión de esta crisis en el plano económico ha tenido “dos grandes aciertos, la liquidez y los ERTE, y en el primero de ellos es donde Iberaval ha dado soluciones”. La actividad de Iberaval en La Rioja durante los seis primeros meses de 2020 se ha incrementado en un 19 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, como consecuencia de la necesidad de financiación por parte de las pymes, autónomos y emprendedores de la región.

Apoyo del Gobierno regional a la economía y al sector del vino

Durante los últimos meses, el Ejecutivo ha puesto en marcha diversas medidas en el área de la economía dentro de una estrategia con dos pilares esenciales: proteger a empresas y trabajadores durante la crisis sanitaria e impulsar la reactivación de la economía durante la fase de la desescalada y la vuelta a la nueva normalidad.

La nueva línea de financiación se une a las líneas de apoyo que ha implementado el Gobierno de La Rioja a través del Plan de Reactivación Económica para empresas y autónomos de la región, que ya están completamente operativas y que ponen a disposición de las bodegas ayudas directas y subvenciones hasta el 40 por ciento para todo tipo de inversiones orientadas a adaptarse a la nueva situación. En el caso de una bodega de hasta 50 empleados, las cuantías pueden alcanzar los 5.169 euros en ayudas directas y hasta 52.200 euros en ayudas a la inversión.