Han sido detenidas dos personas, y hay un tercer investigado. En sus acciones se apropiaron de efectos valorados en más de 12.000 euros.

Dentro de la “Operación Corsita” se ha recuperado un copón, un cáliz y una casulla de sacerdote que habían sido sustraídas.

Los implicados, en estas acciones, tienen entre 20 y 27 años, son de nacionalidad española y vecinos de Cenicero. Los presuntos autores de estos hechos emplearon el uso de la fuerza, para lo que utilizaron una palanqueta y una cizalla, con las que violentaron puertas, ventanas y candados. Las herramientas fueron localizadas en el interior del turismo, propiedad de uno de ellos.

El primero de los robos se cometió en un repetidor de telefonía móvil, ubicado en Cenicero. De su interior se llevaron cuatro baterías, valoradas en 1.200 euros. El segundo, se desarrolló en una ermita de Briones, de la que se sustrajeron un copón y un cáliz de plata bañados en oro y una casulla, valorados en 7.000 euros.

Los siguientes robos se produjeron contra tres camiones cisterna, pertenecientes a dos empresas de Cenicero. De ellos sustrajeron piezas de acero y bronce, valoradas en 4.000 euros. La operación continúa abierta y no se descartan nuevas implicaciones.