La consejera de Salud afirma que las claves para mirar al futuro son los test y pruebas, las políticas proactivas de Salud Pública, la anticipación del sistema asistencial y el desarrollo de medidas para asentar el desescalado. Desde antes del inicio de la pandemia, se ha desplegado una estrategia asistencial integral en la que Atención Primaria, Atención Hospitalaria y Salud Pública han velado por la salud de todos los riojanos.

La consejera de Salud, Sara Alba, ha comparecido por videoconferencia ante la Comisión de Salud del Parlamento de La Rioja para informar de las medidas adoptadas para frenar la evolución del COVID-19 en la comunidad. “La prevención, coordinación, adaptación, anticipación e innovación que hemos trabajado y entrenado en los últimos meses nos aseguran unos sólidos cimientos para afrontar la nueva normalidad que nos va a dejar el coronavirus hasta que se descubra la vacuna”, ha explicado Alba.

En su intervención, Alba ha subrayado el esfuerzo que está realizando toda la comunidad científica para desarrollar tratamientos ante la enfermedad y descubrir una vacuna que pueda distribuirse de forma masiva. Ha insistido en que, hasta que lleguen estas soluciones, la Consejería de Salud trabajará en cuatro grandes ejes para reconstruir la normalidad: la realización de test y pruebas que posibiliten la identificación y reacción epidemiológica; la generación de políticas proactivas en materia de Salud Pública; la sensibilidad y agilidad del sistema sanitario para adaptarse a escenarios cambiantes; y, por último, el desarrollo de medidas de protección colectiva que asienten el desescalado en los ámbitos social y económico.

Para la titular de Salud, “este proceso de deshibernación de nuestros ritmos, hábitos y obligaciones supone trabajar en un nuevo ecosistema vital. Es un escenario en el que todos debemos encontrar el equilibrio para cuidar nuestra salud y seguir con nuestras vidas”. Asimismo, ha insistido en que, a pesar a que no se pueden aportar respuestas concretas a lo sucederá en el futuro más inmediato, “la Consejería de Salud dará soluciones concretas, a pesar de las dificultades, tal y como ha estado haciendo hasta ahora”.

Coordinación y adaptación

A lo largo de su exposición, Alba ha repasado las diferentes medidas que la Consejería ha adoptado en los últimos meses para contener el COVID-19 y que se articulan alrededor de cinco líneas de trabajo: coordinación, adaptación, anticipación, prevención e investigación.

La consejera de Salud ha recordado que, desde el inicio de esta crisis sanitaria se ha trabajado de manera coordinada con el Ministerio de Sanidad, con otras Comunidades Autónomas, con otras Consejerías, colectivos profesionales y agentes sociales. “Es un impresionante esfuerzo de coordinación de personas, medios e instalaciones, sin precedentes en la historia de los Servicios Públicos. Y aún así, con todos nuestros esfuerzos coordinados, el coronavirus ha constatado la fragilidad de la Sociedad en la que vivimos; no sólo en La Rioja, sino en España y en todo el mundo”.

Alba también ha insistido en que, en este proceso de toma de decisiones y adopción de medidas contra la enfermedad han prevalecido siempre los criterios técnico y asistencial, y que ha requerido un constante ejercicio de adaptación. “Debido a la poca certeza que hay alrededor de esta nueva enfermedad, nos hemos visto obligados a ejercer nuestro día a día desde la resiliencia. Lo vemos con los protocolos, que se revisan, perfilan y mejoran todos los días. No hay un manual definitivo sobre COVID-19, pero el COVID-19 se ha convertido en el mejor manual para mejorar nuestro Sistema Público de Salud”, ha comentado Alba al explicar que “el Sistema Público de Salud saldrá muy fortalecido de esta crisis sanitaria”.

Anticipación

Para la consejera de Salud, la capacidad de adaptación ha resultado clave para articular y anticipar las numerosas medidas que se han tomado desde enero de este año para frenar la pandemia: “Hemos movilizado los recursos asistenciales de manera flexible y adaptativa, teniendo en cuenta también que los recursos son finitos y que nos estamos enfrentando a una enfermedad desconocida que nos ha planteado un escenario de permanente, continua y agotadora dificultad”.

Continuando su exposición, Alba ha repasado la estrategia asistencial integral en la que Atención Primaria y Atención Hospitalaria han trabajado conjuntamente con Salud Pública para velar por la salud de todos los riojanos. “Atención Primaria ha dado un paso al frente para atender a los casos menos graves, no por ello menos numerosos. Es una estrategia asistencial integral que ha liberado al hospital para los casos más graves y que nos ha permitido desarrollar una estrategia ágil y robusta en nuestros hospitales, donde siempre ha habido, hay y habrá capacidad y músculo para vencer al coronavirus”, ha explicado.

La titular de Salud también ha establecido el 25 de enero como la fecha de arranque de La Rioja en la lucha contra el COVID-19, día en el que se impartió la primera formación específica entre el personal sanitario del Servicio Riojano de Salud. Y ha repasado las diferentes medidas adoptadas desde entonces y hasta la deshabilitación, en los últimos días, de los controles del Hospital San Pedro de Logroño que se habían destinado de manera extraordinaria al tratamiento de los pacientes con la enfermedad.

Prevención e Investigación

Mirando al futuro y resumiendo algunas de las medidas también realizadas en los últimos meses, Alba ha explicado también el papel que están realizando Salud Pública en las tareas de prevención y el Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR) en materia de investigación.

El Servicio Riojano de Salud ha desplegado una estrategia proactiva a partir del análisis realizado diariamente por el equipo de la Dirección General de Salud Pública. Desde el inicio de la pandemia, Salud Pública ha asumido, canalizado e interpretado todas aquellas órdenes y decretos que se han traslado desde el Ministerio de Sanidad para realizar instrucciones o recomendaciones en la prevención o la lucha contra el coronavirus. “Lo ha realizado en el plano profesional, con documentación para los propios sanitarios, todo tipo de gremios o los propios funcionarios, y también en ámbitos como los espacios deportivos, las residencias de mayores, el transporte público o los centros escolares, entre otros muchos”, asegura la consejera de Salud.

En cuanto a la investigación, Alba ha resumido los diferentes proyectos del CIBIR sobre el COVID-19, centrados en la investigación de vacunas, la vigilancia epidemiológica, el desarrollo de terapias innovadoras, la caracterización clínica, biológica y molecular de la enfermedad, la Inteligencia Artificial y el Big Data. “Son iniciativas presentadas desde el CIBIR que abordan diferentes propuestas adecuadas a esta situación de urgencia y, encaminadas a implementarse en el Sistema Nacional de Salud con resultados concretos, tempranos y aplicables”.